El ataque a la sede del medio de comunicación RealNews y la radio Real FM en Grecia se ha producido miércoles 13 de julio por grupos anarquistas. Lo que constituye otro de los ejemplos que evidencia la presión ejercida contra los periodistas en este país, según afirma Reporteros Sin Fronteras sobre el incidente.
El atentado no ha dejado víctimas mortales pero sí un herido que fue trasladado directamente al hospital por inhalación de humo. El equipo de bomberos del lugar ha advertido de vestigios de tres bombonas de gas que detonaron entre las escaleras externas y la primera planta. Nikos Chatzinikolaou, el propietario de los medios, se ha referido en Twitter así ante el incidente: “Fuego y explosiones en Real FM y Real News. ¡Nos están quemando! Nos quieren cerrar”; mostrando su indignación por el suceso.
El ataque ha sido reivindicado por un grupo anarquista llamado “Thousands of Night Suns”. Su declaración apoyando el ataque fue que el medio de comunicación RealNews apoyaba la propaganda de los políticos griegos, según explica RSF. Las cámaras del medio de comunicación Real Group muestran la imagen de dos individuos enmascarados depositando las bombona inflamables. No obstante fuentes policiales griegas afirman la participación de otras personas en la propagación del fuego.
Este atentado contra el periodismo se ha constituído como el último de los 11 producidos en estos tres años contra los periodistas . Este fenómeno hace necesaria la firma griega del memorando interministerial de la Comisión Europea con el objetivo de proteger a los periodistas. Así mismo, a la integridad profesional del trabajador para garantizar la libertad de prensa propia de los estados de derecho.
En estos momentos, el país heleno se encuentra en el puesto 108 con respecto al tratamiento de la libertad de prensa, tal y como indica el mapa sobre la libertad de prensa en el mundo de RSF. Según los datos del informe, el país heleno consta de una puntuación del 70 sobre 180 en el tratamiento del ejercicio periodístico. Esto que significa que la libertad de prensa ha sufrido un gran cambio de 2021 y 2022, sobre todo a la hora de abordar cuestiones tan importantes como la sanidad o la políticas migratorias del país.
El panorama mediático en Grecia se ha consolidado como uno de los más bajos en cuanto a confianza en los medios por parte de la población debido, sobre todo, a la fragmentación de la parrilla mediática, un contexto político que pone en entredicho la independencia editorial, la crisis económica que ha reducido los presupuestos publicitarios y la falta de seguridad con la que en ocasiones se trabaja con mucho obstáculo policial a los periodistas en manifestaciones y en cuestiones migratorias.
Además, todavía sigue sin resolverse el asesinato del periodista Giorgio Karaivaz que fue tiroteado en su domicilio y donde el gobierno prometió una rápida investigación todavía inconclusa. Es así que desde la asociación RSF se han pedido medidas más duras con el objetivo de proteger a los periodistas como motivo del incremento generalizado de la violencia contra los medios en el país.
