Florencia Amat / Club Internacional de Prensa - Continúa la violencia hacia los periodistas. El 14 de febrero Álex Álvarez, reportero en la radio paraguaya Radio Urundey, fue asesinado a pie de calle en la ciudad de Pedro Juan Caballero (Amambay), fronteriza con Brasil.
Álex Álvarez estaba a bordo de un vehículo con su hermano como copiloto, esperando a que el semáforo se pusiese en verde. Ese fue el momento en el que un motociclista aprovechó para dispararle y darse a la fuga. El coche, sin embargo, no estaba a nombre de Álvarez sino de otro periodista de su misma cadena. Por eso, las autoridades no descartan que el ataque estuviese dirigido al dueño del coche. Según allegados del fallecido, Álvarez "no tenía problemas con nadie", y su programa tampoco está cargado con contenidos o ideología que pudiese causar conflictos. Sea lo que fuere, sigue tratándose de un caso de violencia periodística.
El periodista Rubén Valdés, compañero de la víctima, declaró a la radio ABC Cardinal que vendió su vehículo a Álvarez hace una semana. Valdés, que cubre temas policiales, admitió que anteriormente recibió amenazas, pero señaló que “no fue nada grave”. “Es uno de los trabajos más peligrosos acá”, indicó el también periodista sobre su profesión.
Según el periódico La Nación, Rubén Valdés, esta vez en comunicación con la 780 AM manifestó que posiblemente él haya sido el blanco de los sicarios. “Yo siempre uso chaleco antibalas, ya que hace algunos años recibí amenazas, pero nunca acepté guardias”. “Quedé muy asustado, aquí en Pedro Juan estamos como en la época del viejo oeste, con el peligro de que nos maten a todos, sobre todo a los que cubrimos el área policial como es mi caso”.
En su emisora, le recuerdan con cariño y lanzan su más sentido pésame.
La Mesa para la Seguridad de Periodistas del Paraguay (MSP) ha emitido un comunicado sobre lo ocurrido. Asegura que "con este caso, Paraguay suma 21periodistas asesinados desde 1991 a esta fecha, así como más de 600 casos de violencia contra comunicadores y medios de prensa. De esa cifra, nueve periodistas fueron asesinados en la ciudad de Pedro Juan Caballero".
También recuerdan que "la hipótesis de inicio ante la existencia de un hecho punible que afecta a un periodista o medio de prensa es la de que está motivado por la intención de coaccionar y evitar la libertad de expresión. Es menester, por tanto, que este crimen sea investigado en profundidad para dilucidar sus causas, identificar a sus autores y proveer justicia en el caso".
