Las nuevas tecnologías han cambiado la forma de hacer periodismo debido a la digitalización, el posicionamiento SEO, la analítica web y las redes sociales son ahora una demanda a tener en cuenta en todo trabajo informativo
El periodismo ha cambiado mucho durante las últimas décadas, sobre todo la forma de hacer periodismo. Aquella frase de McLuhan que aprendimos en la facultad “el medio es el mensaje” ha cristalizado por fin en nuestro tiempo a través de la creación de múltiples canales de información y comunicación ciudadana. En un mundo tan instantáneo y complejo tecnológicamente como este ¿Qué herramientas digitales deberíamos saber emplear los periodistas? ¿Cuál es nuestro papel en la sociedad? ¿Seremos capaces de adaptar la profesión a las exigencias del público o sus demandas podrán con nosotros?
Según Javier Mayoral, profesor de la Universidad Complutense: “El nuevo soporte nos ha dejado pasmados. No es que hayan aparecido de pronto nuevas tecnologías que no sabemos utilizar o rentabilizar. No es que a menudo los periodistas estén desarmados, dominados por esas tecnologías. No es solo que, además de todo lo anterior, hayan cambiado también la organización del trabajo y las rutinas. Lo más estupefaciente, lo que nos deja de verdad pasmados, es que han desaparecido o se han alterado algunas nociones básicas del periodismo, porque el nuevo soporte ha suscitado cambios que afectan a la esencia misma de la profesión.”
En el periodismo tradicional, al que señala la crítica de Mayoral, existían también conceptos como la inmediatez, la rareza de las informaciones e incluso su capacidad para ser atractivos al público. No obstante, el cambio de paradigma tecnológico ha hecho evidentes cambios en el quehacer diario de los contenidos. Ahora se trata de hacer las informaciones mucho más rápido que antes, tratando de finalizar cuantos más trabajos periodísticos en un determinado espacio de tiempo. Además, tienen que ser atractivos, raros, actuales y sobre todo gozar de las garantías que el ejercicio de la profesión exige, a saber: constar de múltiples fuentes fiables y una prosa clara y analítica.
Tal y como explica el periodista freelance, David Blay Tapia: “Hoy en día se apuesta en mayor medida por un nivel de contenido alto que por un contenido que sea de calidad” y apunta que, en realidad, la causa de ello no es la digitalización, sino las crisis económicas frecuentes que han asolado a la población durante estas últimas décadas. “Si en 2007 había 3 periodistas para hacer 4 páginas, ahora hay un solo periodista para hacer esas 4 páginas, pero además también le piden que haga una pieza para redes sociales y que haga un podcast mientras lo escribe”, afirma el periodista.
Es así que la crisis de valores en el periodismo no tiene que ver con la digitalización en sí, es más esta intenta hacer un periodismo decente. El problema principal es la falta de gente y yendo más allá, la crisis económica. Según apunta Mayoral en su libro Periodismo herido busca cicatriz la principal causa de la degeneración del periodismo es la crisis económica porque las empresas informativas se dedicaron a “sobrevivir” en vez de hacer contenidos de calidad. Sumándose la cuestión de la digitalización, los medios intentaron buscar un mercado cada vez más amplio en el público y menos financiado por las publicitarias fomentando el ejercicio de clickbait y la prensa amarillista con el fin de convertir sus publicaciones en bancos de likes y visualizaciones.
Desde siempre los periodistas han tenido que saber utilizar los mejores recursos tecnológicos para desarrollar profesión. Hoy en día los recursos son múltiples y prolifera la frustración a la hora de aprender a emplearlos. Como indica Juan Merodio, experto en Marketing Digital y Negocios Online, cada vez es más necesario incluir la tecnología en la formación de los jóvenes comunicadores, ya trabajen para una marca o un diario nacional porque tratarán la información de forma más holística, teniendo en cuenta su responsabilidad con el público y la sociedad.
Herramientas como el posicionamiento en redes y análisis web, conocimientos sobre copyright y especializarse en periodismo digital son algunas de las herramientas que el experto recomienda para ejercer la función periodística. En esta última, en concreto apunta la necesidad de incluir formación general ya que hay personas que por culpa de la brecha generacional no están haciéndose con estos recursos.
Como respuesta a la decadencia de los usos periodísticos, en concreto a la falta de fuentes y la frecuente contaminación informativa Merodio pone el foco en la tecnología como el posible escape a este paradigma con el sistema blockchain a desarrollar en un futuro para garantizar el buen ejercicio del periodismo. De esta manera, el periodismo no ha degenerado por culpa de la digitalización. Está en cambio pretende salvarle de la crisis económica que lleva sufriendo durante años, siendo la causa de la mala praxis de la profesión. Es así que la tecnología constituye una fuente de inspiración y ha favorecido de forma exponencial sus relaciones. Por esto mismo, el foco se encuentra en la decadencia económica y no tanto en la falta de recursos. El problema sigue siendo el mismo.